Expensas: voracidad PRO y apatía consorcial
Por JORGE A. HERNÁNDEZ*Pretender imponer una digitalización de las expensas comunes en un brevísimo lapso de sesenta días, como lo intentaron con laResolución 408/SECGyAC/12 en la ciudad de Buenos Aires, parece ser la forma más contundente que tienen algunos funcionarios públicos de exponer hasta qué grado de soberbia e impunidad son capaces de llegar cuando se dejan manipular por personeros de organizaciones nocivas a los intereses de la comunidad.
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Un cambio de los usos y costumbres tan relevante debería haber comenzado, como sostienen algunos expertos en la materia, por la elaboración de un plan previo de alfabancarización con una progresiva implementación, no menor a un año, tendiente a permitir la instrucción sobre el manejo de la operatoria bancaria a los distintos sectores que integran la comunidad consorcial. Simultáneamente se iría previendo el redimensionamiento de las megaredes de los sistemas electrónicos de recaudación con el propósito de evitar agravar las serias dificultades que actualmente existen en ese rubro que además de provocar tediosas esperas y largas filas generan diariamente innecesarias pérdidas de tiempo frente a las cajas y cajeros.
Es sabido que muchas personas carecen por completo de conocimientos sobre las nuevas y ágiles operatorias bancarias, algunos por carecer de posibilidades o por no necesitarlo hacer todavía, y otros porque simplemente se resisten a ingresar al sistema debido a profundas y atendibles razones culturales de distinta índole, entre las cuales se puede destacar el temor y la desconfianza instaladas en la población desde los tiempos del corralito bancario, que muchos presuponen que en cualquier momento puede volver a instalarse.
Hay quienes no encuentran incentivos para bancarizarse, y están aquellos otros querechazan de plano someterse a la indiscriminada reducción de sus depósitosmediante los infaltables e inevitables débitos diarios en las cuentas corrientes y de ahorro, justificados mediante cargos de costo de mantenimiento, remisión de extractos, formularios, impuestos, retenciones, etc.
Querer hacer ingresar a la fuerza en apenas 60 días, un volumen de más de dos millones de nuevos clientes para el pago de las expensas a las actuales filas en las cajas y cajeros de los bancos y sistemas de pagos electrónicos en pleno verano, donde los cuellos de botellas son más evidentes debido a la natural reducción del personal con motivo de las licencias por vacaciones, resulta a todas luces un primer y gran despropósito.
Pero es indiscutible que una vez articulado y ejecutado un razonable plan dealfabancarización de los distintos sectores integrantes de la comunidad consorcial (copropietarios, administradores, personal de portería, proveedores de bienes y servicios a los edificios), será posible e imprescindible instaurar un completo proceso de digitalización de las liquidaciones mensuales, de las rendiciones de cuentas anuales, de los comprobantes de egresos y de los recibos de pago de las expensas comunes en base al prototipo de contenidos elaborados por especialistas en el tema y que dieran lugar a las Normas IRAMsobre el particular, dejando de lado inconsistentes "programitas de juguete" como el que diera, aparentemente, origen a las anacrónicas pautas y formularios expuestos en laResolución 408/ SECGyAC/12.
Por otro lado la futura digitalización en el ámbito de la propiedad horizontal no debería ser tan paupérrima de contenidos como se propone en la mencionada resolución. Merece también contemplar la inclusión de los reglamentos de copropiedad y administración, de los reglamentos internos y específicos, del plan de trabajo del personal de portería, de las actas de asambleas, los planos y habilitaciones, los contratos de abonos y servicios, y demás instrumentos previstos en el inventario documental de los consorcios de propietarios, como son, por ejemplo, los antecedentes administrativos, técnicos, judiciales, laborales, previsionales y fiscales, entre otros. El copropietario tiene plenos derechos a disponer, en cualquier momento y lugar, de toda la información vinculada a su propiedad y no a una mínima parte para favorecer a los "amigos del poder" como se ha intentado con la Resolución 408/SECGyAC/12.
Y por último, recién entonces concretar el tercer y más significativo paso, la ansiada meta de lograr la definitiva despapelización en la administración de los edificios de propiedad horizontal, mediante las debidas certificaciones digitales, como lo venimos pregonando desde hace no menos de 10 años atrás.
Pero parecería que se ha convertido en una insana costumbre de la actual administración pública de la ciudad, el comenzar mal y al revés, y en consecuencia era de esperar lo que sucedió: chocaron frontalmente contra la realidad. Realidad que, en el caso de la comunidad consorcial no resulta ser muy sencilla ni fácil de interpretar, si no se consulta a los entendidos que acrediten suficientes conocimientos teóricos y las experiencias debidas a una cuestión vecinal con tan alto nivel de conflictividad por su propia naturaleza y de inocultable extrema sensibilidad social.
Un tema aparte, que merecería para el futuro tener muy en cuenta el actual jefe de Gobierno de la Ciudad , ing. Mauricio Macri, es el hecho de que para defender la insostenible propuesta de "expensas claras" lo hicieran salir a través de los medios de prensa a exponer su impronta de despapelizar la administración de los edificios, proponiendo con ello suprimir más de dos millones y medio de fotocopias por mes correspondientes a las liquidaciones de expensas comunes.
Pero por otro lado, mientras se propagaban estas rimbombantes apreciaciones de loable defensa ambientalista, los mismos copropietarios comprobaban que en el sobre que recibían con las boletas del impuesto al ABL/2013 (Impuesto de Alumbrado, Barrido y Limpieza) había folletería que demostraba un formidable derroche de papel de lujo, por ser de mayor gramaje, del tipo ilustración, en color 4/4 y con mayor grado de contaminantes al medio ambiente, para simplemente comunicar una burda propaganda política. Folletería política que no solo le fue remitida a principios de año a la cuantiosa cantidad de unidades funcionales de los edificios, sino también a las casas y otros tipos de inmuebles de la ciudad (galpones, fábricas, estacionamientos, centros deportivos, etc.), es decir a muchos millones más que los que decían que pretendían evitar en la propiedad horizontal. Deberían haberle advertido al ingeniero Jefe de esta tremenda contradicción.
No fue éste el primero, ni será seguramente el último caso de acciones incongruentes a los que deberán acostumbrarse a soportar los consorcistas. En ese sentido, recientemente el jefe de Gabinete del G.C.B.A. lic. Horacio Rodríguez Larreta anunció otra medida gubernamental, aún más categórica, para demostrar palmariamente hasta qué punto pueden llegar a incomodar, denigrar y someter a los propietarios de las unidades funcionales y a los administradores de los consorcios.
El disponer que un temible sindicato como el SUTERH (Sindicato Único de Trabajadores de Edificios de Renta y Horizontal) comandado por el ex legislador Víctor Santamaría, que en su momento tuvo que renunciar a su cargo
en la Legislatura Porteña por la investigación judicial que lo involucraba en la quiebra del ex Banco Patriciospor los veinte millones de dólares desaparecidos del SUTERH,tenga la potestad de "educar" a los propietarios y "capacitar" a los administradores, traspasa los límites de la más osada desvergüenza expuesta por un gobiernohttp://www.seccionpolitica.com.ar/la-ciudad-y-el-suterh-firman-un-convenio-aid17481.html.
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Es tan revolucionaria, por no decir absurda, la medida adoptada por estos dos personajes políticos, que seguramente pasarán a la historia de la historieta como los iniciadores de una nueva etapa en la otrora lucha de clases, la era del "Peronismo-Pro", cuya doctrina podrá llegar a sustentar, por ejemplo, que los alumnos tengan a su cargo "educar y capacitar" a sus maestros y profesores; los delincuentes a los jueces; los obreros a los empresarios; los pacientes a los médicos; los polizontes a los marinos y los narcotraficantes a los políticos.
Parecería que para estos dos dirigentes porteños, "todo es igual, nada es mejor" y están logrando junto al RPA (Registro Público de Administradores de Consorcios), y la DGDyPC(Dirección General de Defensa y Protección al Consumidor) convertir a la propiedad horizontal en un gran circo, y a no dudarlo, en cualquier momento los veremos salir de gira con su show por gran parte del país.
Pero tampoco resulta tan extraño este renovado impulso al maridaje político entre el gobierno de la ciudad y el gremio de los encargados en detrimento de los consorcios de propietarios y de sus administraciones.
Hay una serie de medidas que se vienen adoptando en los últimos cinco años, directamente en contra de los consorcios de propietarios, que parecerían tener una única finalidad encarecer los gastos comunes con disposiciones meramente burocráticas, contradictorias, fugaces y en muchos casos impracticables, hasta que se conviertan en impagables para una gran parte de los copropietarios y por esa vía intentar solapadamente adueñarse de los departamentos que llegasen a ser rematados judicialmente por las deudas de expensas impagas como ya se intentó hacerlo en un municipio del Gran Buenos Aires, aunque mediante otro tipo de ardid parecido.
Para obtener sus fines necesitan lograr reunir ciertas condiciones mínimas: desmoralizar a los copropietarios, enfrentar a los encargados de edificios con los consorcistas; denostar, perseguir y destruir a las administraciones de consorcios; entorpecer la contratación con los proveedores habituales de bienes y servicios a los edificios; aumentar exageradamente los impuestos inmobiliarios sin dar una mayor y mejor contraprestación en higiene urbana, seguridad, iluminación y demás servicios básicos a cargo del gobierno comunal. ¡Y vaya si lo están logrando!
La ciudad de Buenos Aires huele muy mal y no es exclusivamente por la cantidad de basura y residuos que día a día se acrecientan en la vía pública debido a la inoperante y deficiente tarea de los responsables de arbitrar las medidas adecuadas para mejorarla.Existen otros sectores enquistados en la administración pública que arrojan constantemente sobre la sociedad porteña un pestilente olor a corrupción.
Son los mismos que se sienten envalentonados con los fugaces resultados a favor, que les vienen reportando sus últimas resoluciones dictadas en contra de los consorcios de propietarios y sus administraciones.
Y ahora vienen por todo, todos y todas.
Seguramente para proseguir con su derrotero, ya tendrán establecidas las próximas medidas, por ejemplo:
- Un encargado político obligatorio por edificio, para controlar la vida privada, e informar(¿a quién o quiénes?) qué lee y aprende cada consorcista;
- Restablecer la exigencia del permiso previo del SUTERH para poder ejecutar reparaciones y mejoras en las partes comunes del edificio (como lo intentaron imponer en su momento);
- La declaración jurada anual sobre la tenencia en cada departamento de bienes considerados de tipo suntuario a exclusivo criterio de la administración pública (como ya fue intentado con los aparatos de aire acondicionado);
- Un impuestazo a los gastos comunes, aplicándole al total de la liquidación digital de las expensas mensual una tasa diferencial del 3 al 4% en concepto de ingresos brutos.
- Un porcentaje sobre los sueldos del personal de portería para sostén de organizaciones que tendrían por fin la supuesta defensa de los consumidores consorcistas.
Y mientras meditan adormecidos, consumiendo discursos e imágenes sobre relatos de antiguas leyendas setentistas de la mitología argentina, de repente algunos consorcistas sentirán que golpean a sus puertas y al preguntar quién es, nadie les contestará. Es que ya será tarde, esta vez vinieron por ellos. y por sus pertenencias también.
Y se habrán agotado las excusas de seguir cargando culpas al administrador del consorcio por el desmedido aumento de las expensas.
* Administrador profesional de Propiedad Horizontal, director de la revista "Reunión de administradores" y presidente de la Fundación Reunión de Administradores.Esta nota fue publicada en la revista "Reunión de administradores" del mes en curso bajo el título "Alfabancarización en los consorcios".
N. de la R.: Santa María es además el presidente del Partido Justicialista de la Capital Federal y uno de los principales referentes del Frente para la Victoria.
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